El plasma rico en plaquetas es un tratamiento avanzado 100% autólogo (procedente de tu propio cuerpo) de gran eficacia contra el proceso del antienvejecimiento.
No utiliza productos artificiales ni ajenos al propio cuerpo, por lo que no hay ninguna posibilidad de reacción, alergia ni rechazo.
- Permite retrasar el proceso de envejecimiento de la piel.
- Activa la regeneración celular.
- Piel más luminosa y con mejor textura.
- Menos flacidez y arrugas.
- No conlleva riesgos de alergias ni reacciones de incompatibilidad.
- No genera marcas ni cicatrices, ni se debe guardar reposo.
El tratamiento consiste en extraer sangre del propio paciente y procesarla bajo estricto control médico y sanitario, de modo que podamos obtener una fracción de plasma con una alta concentración de plaquetas que aumenten la proliferación y migración de fibroblastos. Esto, nos asegura un nivel 7 veces más alto de factores de crecimiento que pueden actuar como regenerador para la reducción de la inflamación, prevención de fibrosis, remodelación tisular y angiogénesis.
Una vez extraído y procesado, el PRP puede ser aplicado en cara, manos, escote y cuero cabelludo en forma de mesoterapia (micro-inyecciones).
Su efecto es progresivo y llega a su máximo potencial al cabo de 20 o 30 días. Se recomiendan tres sesiones anuales (espaciadas cada tres o cuatro semanas) para optimizar el efecto.
